Sus buques, cañones, misiles y aviones, tronaran de nuevo para alcanzar, solo, "objetivos militares Sirios" con esa perfección y puntería, de la que siempre han hecho gala, que solo morirán "los malos malisimos", siempre jaleados por los mismos palmeros que animaron las guerra de Irak y Afganistan, guerra que no para, años después, de aportar sus muertos en el recuento mundial de hipocresia.
No soy un especialista en estos temas, aunque tengo mi propia teoría, pero de lo que estoy seguro es de que se han buscado desde años la excusa perfecta, no para defender a los "democratas" que luchan contra el dictador, sino para acabar con un régimen que nunca a sido proclive a los intereses norteamericanos en la zona y además, enemigo jurado de sus protejidos, Israel.
El ataque con gas a población civil, aun sin averiguar el culpable, y el tiroteo a los observadores (¿tan tonto ha sido el régimen) ha sido como digo, la excusa para que se pusiera en marcha tan rápidamente la maquinaria bélica que solo, según ellos, tratara de mermar la capacidad del ejercito Sirio, aunque estoy seguro que esto es el principio del fin del dictador Al Assad, tiempo al tiempo, y de otro de los países mas "occidentalizados" y permisivos, religiosamente hablando, de la zona.
Pero volvemos a lo mismo de siempre, el interés de Occidente por la inestabilidad de un país que, curiosamente...¡¡posee petróleo!! ¡¡premio!!, que valiosas son las vidas de los rebeldes Sirios cuando detrás esta la industria petrolera y la armamentística, nada de comparar con las de los Palestinos o los Saharauis, no, los derechos de estos se miden por lo vacíos o llenos que tengan los bolsillos.
Con todo, estoy con el pueblo Sirio que seguro, sera el que mas va a perder en esta absurda (como todas) guerra, y que al final esperemos que cuando acaben y "pacifiquen" el país, no dejen a un gobierno tan estupendo y "demócrata" como el de Irak y Afganistan, que promulgan leyes contra la dignidad de la mujer y la libertad de sus ciudadanos con el beneplácito de sus protectores, pero claro, como decía un presidente Norteamericano..."son nuestros hijos de puta...".
